Quizá algunos se pregunten por qué introduzco este tema dentro de la etiqueta de actividad física. Sin embargo, es el lugar en el que mejor se aposenta. Además soy estudiante de CC. de la Actividad Física y del Deporte de Toledo, y este es el tema que más me atrae, por tanto, me gustaría dedicar tiempo a que la gente se conciencie sobre la problemática de la obesidad.
En primer lugar definamos qué es la obesidad: no es sino un exceso de grasa en nuestro cuerpo, con lo cual nuestro volumen corpóreo aumenta y, con ello, nuestro peso. Esto conlleva una serie de consecuencias, siendo la estética la más característica, no porque sea la más importante, sino porque es la más popular. La gente principalmente no quiere estar obesa porque "no es bonito". Esto lleva a otra consecuencia, tanto de los obesos como de los no obesos: la salud mental. La obsesión con el peso tanto si se es gordo como si no puede llevar a desarrollar ciertas patologías como bulimia, anorexia o vigorexia. Además, de estos problemas también derivan consecuencias sociales, aparte de los ya generados posiblemente por personas que no acepten el aspecto de los demás y lo utilicen para dañar a la persona; me refiero a problemas de movilidad y de valerse por si mismo en personas que tienen este problema de forma exponencial.
Sin embargo otra de las consecuencias es que repercute en nuestra salud física, y este es el principal cometico de este post. Lo más importante es que debido a la obesidad, es probable que aparezcan en el organismo "factores de riesgo".
Antes de poder continuar, debo explicar qué es un factor de riesgo: nos referimos a factores de reisgo de que nos ocurra un accidente cardiovascular (AC). Es decir, estos factores son un medio por el cual nuestro cuerpo tendrá más o menos posibilidades de sufrir, por ejemplo, un infarto de miocardio o un ictus. Los factores de riesgo son:
- Hipertensión
- Hiperlipidemia (colesterol alto)
- Fumar (también fumador pasivo)
- Edad
- Sexo
- Raza
- Herencia genética
- Diabetes
- Niveles altos de ácido úrico
- Características de comportamiento tipo A
- Sedentarismo o inactividad física
Una vez mencionados, he de decir que no todos tienen la misma naturaleza. Es decir, por ejemplo, con algunos se nace y otros son debidos a los hábitos de la persona. Podemos clasificarlos:
- Nacimiento: herencia genética, sexo, raza y podríamos poner en este apartado también la edad, ya que es algo que no podemos cambiar.
- Hábitos: fumar, sedentarismo y también podemos poner aquí herencia genética, ya que aunque no creais que tenga sentido, un gen malo puede no manifestarse nunca si los hábitos de vida son buenos; además del tipo de comportamiento tipo A.
- Derivados de la obesidad: hipertensión, hiperlipidemia, diabetes.
Después de la clasificación, se debe tener en cuenta lo siguiente: contar con dos de todos estos factores o más, significa estar en una franja de riesgo alto de tener un AC. En este post os digo que la obesidad produce tres de estos factores de riesgo de estos 11 posibles citados. Sin embargo tenemos que tener en cuenta las siguientes cuestiones:
- Un obeso, por regla general es sedentario.
- Malos hábitos alimenticios y de ejercicio llevan a la presentación de la obesidad, lo que hará que la genética, si es propensa en algún tipo de desarrollo de un gen dañino, este se manifestará.
- El sexo: el sexo realmente no influye como factor de riesgo. Sin embargo si lo hace como forma en que las grasas se distribuyen en el cuerpo: una mayor acumulacón de grasa en el abdomen es más dañina que cualquier tejido graso situado en cualquier otro lugar del cuerpo. Y esto es importante, porque la distribución de la grasa en el hombre hace que ésta se deposite más facilmente en el vientre, mientras que la mujer la deposita en la caderas. Si la persona es muy obesa, todos los lugares del cuerpo estarán repletos de grasa, por lo que la posibilidad de AC aumenta.
Por tanto hemos aumentado la cuenta de 3 a 6 de la lista. Podemos deducir de aquí que ser obeso produce grandes posibilidades de tener un AC.
Descripción de los factores de riesgo:
Descripción de los factores de riesgo:
Hipertensión: la hipertensión es una enfermedad muy conocida, aunque en el 90% de los casos no se conoce el origen de la misma en el sujejto. Normalemente, se le pide que deje de tomar comidas muy saladas o cocinar con mucha sal, ya que el sodio hace que aumente la presión arterial (PA).
El corazón bombea sangre a las arterias, produciendo una presión sobre ellas en las paredes. Si estas son muy rígidas o el plasma es muy viscoso al corazón le cuesta mucho más realizar este proceso, por lo que si en algún momento la resistencia que tiene que vencer para bombear es superior a la fuerza propia, el corazón fallará.
Razones por las que un obeso puede ser hipertenso: puede ser por varias razones, ya que unas cosas llevan a otras, por lo que es difícil saber qué la causa. La principal causa podríamos decir que es la presencia de placas de ateroma en las paredes arteriales, lo que hace que la luz de los vasos sea menos, aumentando la presión. Esto también es derivado del hábito de fumar, ya que el tabaco produce grietas en las arterias, en las cuales se mete todo tipo de cosas, creando una costra que disminuye la luz. Si la luz es más pequeña de lo que devería y un coágulo de cierto tamaño se crea en el cuerpo, podría llegar a haber un taponamiento de la arteria, produciendo un paro cardíaco. Existen otras posibilidades pero esta es la más común.
¿Cuándo se me considera hipertenso?: una tensión diastólica <85 mm Hg (milimetros de mercurio) se considera normal; y una tensión sistólica <140 mm Hg se considera también normal. A partir de ahí, valores superiores se consideran altos, con distintos niveles de gravedad.
Hiperlipidemia: al hablar de la hipertensión, ya he explicado el principal problema que puede ocasionar la acumulación de colesterol en el cuerpo. Sin embargo, hay otro apartado que es necesario conocer. Existen varios tipos de colesterol siendo los más conocidos los siguientes: Colesterol de Baja densidad (LDL) y Colesterol de Alta Densidad (HDL), siendo sus siglas en ingles. Ambos son colesterol y, por lo tanto, grasa; pero podemos decir que el LDL es malo y el HDL es bueno. ¿Por qué? El LDL es el colesterol que se adhiere a las placas de ateroma y a la griestas en las venas y arterias produciendo la disminución de la luz del vaso y por lo tanto la posibilidad del AC. Sin embargo, la HDL hace que como de "camión de la basura" recogiendo la LDL del torrente sanguíneo y eliminándolas del cuerpo.
¿Cuándo se considera que tengo el colesterol alto?: cuando la suma de todo el colesterol de todos los tipos suma más de 200 mg.dl. Sin embargo, si contamos por separado, personas con valores superiores a 160 mg.dl o 135-159 mg.dc y otros dos factores de riesgo, también serán contados como que tienen este factor. Pero, si contamos con que nuestro colesterol bueno, el HDL está en nieveles superiores a los 45 mg.dl, restaremos un factor de riesgo a la cuenta.
Fumar: el tabaco es uno de los hábitos más arraigados en nuestro país y podría decirse en el mucho entero. Podríamos aplicar el dicho de "todo lo malo se pega", porque es una de las costumbres que más se transmiten, a pesar de que hoy en día se conocen muy bien sus efectos perjudiciales. El humo del tabaco, entre otros elementos, lleva monóxido de carbono. Esto produce que a la persona que lo está respirando le sea más difícil transportar el oxígeno, ya que los glóbulos rojos se relacionarán con estas moléculas, produciendo dificultades respiratorias. Los pulmones perderán capacidad vital, y la falta de llegada de oxígeno a las células producirá que no sean necesarios altos números de mitocondrias, por lo qu estas no se producirán, o incluso se destruirán. Esto llevará a la larga (y este es el verdadero problema) a un estado de baja forma. ¿Pero, por qué fumar puede llevarnos a sufrir un AC? Fumar, como hemos dicho, produce un endurecimiento de las paredes de las arterias, que terminan por agrietarse y comienza el ciclo de creacion de la costra y disminución de la luz. La siguiente razón es porque nuestras células rojas, al llevar menos oxígeno, abastecen en menor medida a todas las células de nuestro cuerpo incluyendo las del corazón.
La nicotina produce un aumento d ela frecuencia cardíaca y de la tensión arterial e inhibe los mecanismos anticoagulantes de la sangre (si unimos esto a que la luz de los vasos es menor...).
Las personas que fuman son el doble de propensas a tener un AC, a cualquier edad.
Otra grave enfermedad que se puede desarrollar por fumar es el cáncer de pulmón. Una persona puede tener la genética predispuesta a ser más susceptible a padecer este tipo de cáncer, pero si no es fumador puede evitar que éste aparezca.
*Esta es una de las razones que me han llevado a escribir este post. Un tío mío tiene cáncer de pulmón. Si mediante mi post y la prevención puedo hacer que alguien se pueda librar de padecerlo, escribir esto tendrá sentido.
Edad: la edad no es un factor de riesgo propiamente dicho. Sin embargo, el deterioro del cuerpo derivado del envejecimiento hace que factores externos puedan hacernos más daño, así como existe mayor posibilidad de que ocurran fallos internos. Este factor ayudado por otros factores puede derivar en muchas cosas, entre ellas un AC.
Raza: poblaciones de ciertas regiones de la tierra tienen distintos tipos de genética o mejor dicho, tienen diferentes posibilidades de manifestación de genes. Existen tribus americanas que son propensas a coger peso. Sin embargo, no había ningún indio obeso hasta que los hábito sedentarios y los malos hábitos de alimentación llegaron a ellos.
Herencia genética: la herencia genetia es el factor sobre el que menos podemos influir, aparte de la edad. Se calcula que sólo podemos influir en un 30%, actuando comprometidos con nuestros hábitos saludables para que no aparezcan o se manifiesten los genes dañinos.
Enfermedades derivadas de una genética adversa pueden ser la diabetes, el hipertiroidismo o el hipotiroidismo. Esta última hace que el cuerpo no gaste suficiente energía, haciendo que ese exceso se acumule, produciendo la obesidad.
Otros problemas pueden ser enfermedades del corazón congénitas. Las debilidades cardíacas pueden hacer que personas jóvenes y fuertes pierdan la vida en esfuerzos que podrían aguantar o que aguantaban normalmente por no conocer este factor limitante. Si una persona tiene deformaciones en el corazón, debilidad en las arterias coronarias o cualquier otro tipo de problema (que normalemnte no se conoce) tiene muchas papeletas a sufrir un AC, incluso a edades tempranas. Si algun familiar a sufrido un AC es imprescindible saberlo, ya que si es un familiar directo es probable que el mismo problema lo sufra también el sujeto. si un familiar varón (padre, abuelo, hermano, tío) ha sufrido un infarto antes de los 55 años, es conveniente hacerse una prueba de esfuerzo para saber si sufre el mismo trastorno. En caso de ser mujer, la edad deberá ser inferior a 65 años.
Diabetes: no conozco mucho el tema de la diabetes. Sin embargo si que puedo comentar que la obesidad produce diabetes y, que si se revierte el estado de obesidad, la diabetes también remite.
Ácido úrico: este factor de riesgo no lo concía hasta que leí un poco más sobre el tema. Aparece en el libro de Heyward. Prometo investigar un poco más para ampliar este apartado.
Características de comportamiento tipo A: las personas que presentan este tipo de comportamiento tienen más posibilidades de sufrir un AC. Se caracterizan por lo siguiente: imaginaos que un obeso de unos 130 kg decide ir al gimnasio a perder peso. El monitor le dice que realice cierta cantidad de ejercicios. Sin embargo, está tan motivado que quiere realizar el doble de ejercicios y a una intensidad mucho mayor que la que le ha aconsejado el profesional. Un aumento demasiado alto y brusco de la frecuencia cardíaca con demasiados factores de riesgo puede desembocar en un AC. Ejemplo: ejecutivo sedentario que pasa muchas horas sentado en una oficina y que come muy mal, por lo que acarrea 110 kg de peso. Decide que ha llegado el día de cuidarse. Se compra unas zapatillas, unos pantalones una camiseta y un mp4 para escuchar música mientras corre. Sale a correr sin calentar de la puerta de su casa a una velocidad elevada. A los diez minutos su corazón no puede aguantar más y falla.
Por tanto es importante, y no solo para los obesos, seguir las indicaciones de un profesional para evitar este tipo de situaciones. Llevar una progresión adecuada en la rutina de ejercicio físico es crucial para poder mejorar la salud.
Sedentarismo: el sedentarismo es el más peligroso de todos los factores de riesgo. Los problemas derivados de estar parado son atroces. Empezando por la diferencia de valores en la ingesta y el gasto calórico. Si se está parado se gasta menos energía y, si una persona come en abundancia, meterá en su organismo una cantidad de energía que no se va a utilizar. El cuerpo almacena esa energía en forma de tejido adiposo (grasa), y aquí comenzamos el ciclo que despierta de la obesidad.
Agrava todos los demás factores de riesgo.
Por esta razón, podemos decir o mejor dicho podemos afirmar, que la obesidad es una precursora del accidente cardiovascular. Muchos de vosotros podréis decir lo siguiente: mi abuelo tiene 79 años, fuma se pasa el día en casa y además pesa 95 kg con 1,70 de altura; no contentos con eso, toma pastillas para la tensión porque la tiene alta y está como una rosa. Solo os puedo contestar que cada individuo es diferente. Puede pasarte esto y morir de muerte natural, o que a los 22 años te de un infarto jugando al fútbol. El AC es la segunda causa de muerte en España, solo detrás de los accidentes de tráfico, aunque no se si este dato ha cambiado debido a la disminución de accidentes de tráfico mortales.
Una vez descritos los problemas cardiovasculares que derivan de la obesidad, paso a describir otro problema: la movilidad. Una persona obesa no solo tiene incertidumbre en el futuro por no saber si su corazón aguantará mucho tiempo más (el que es consciente de esta realidad, ojos que no ven corazón que no siente), sino que su vida diaria será difícil. Subir una escalera, conducir, andar... incluso sentarse o tumbarse puede ser difícil y, ya no os quiero ni contar, levantarse. El peso es importante. La fuerza de la gravedad está presente en nuestras vidas, y la fuerza es masa por aceleración: cuanto más masa tiene nuestro cuerpo, más fuerza será necesaria para moverlo.
Otra debilidad: el peso puede hacer mella en las articulaciones, siendo especialmente débiles las del tren inferior y también la columna vertebral.
Las posibles soluciones de la obesidad son variadas, llendo desde llevar una dieta sana y hacer ejercicio... hasta cirujía. El método más drástico es el de reducción de estómago, que es de un 90% (es decir, tu estómago se reduciría a un 10% de su tamaño original), con lo que el resto de la vida tendrías que alimentarte de vegetales, y además en poca cantidad, ya que tu estómago será una décima parte de lo que era.
Con todos estos datos doy por concluido el post diciendo que la obesidad es un círculo viciosos del que es difícil salir: se comienza a ser obeso y se quiere dejar, pero como cuesta más hace ejercicio debido al peso se deja y se engorda más y así sucesivamente.
Siendo realista, no se si alguien leerá este post, pero si a alguien le sirve de algo, si le conciencia a él o hace que algún familiar o amigo cambie su estilo de vida me doy por satisfecho.
Fuentes:
Heyward H., (1996) "Evaluación y prescripción del ejercicio" 2ª edición.
By Dani!!
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